Muerte súbita
¿Qué es la muerte súbita?
Es cuando una persona fallece en el plazo de una hora de haber iniciado sus síntomas. La muerte súbita puede ocurrir en personas previamente sanas o en pacientes que ya padecían alguna enfermedad. La causa más común de la muerte súbita es un infarto agudo de miocardio. Sin embargo, el evento final generalmente obedece a una arritmia denominada fibrilación ventricular que produce un paro cardiaco. La fibrilación ventricular es mortal si no se trata en los primeros minutos.
¿Cuáles son los síntomas?
La persona puede manifestar dolor en el pecho, falta de aire, palpitaciones, palidez, sudoración y sensación de muerte inminente. Ocasionalmente la persona pierde súbitamente el conocimiento, como si se tratara de un síncope.
¿Qué medidas se deben tomar?
Se debe solicitar ayuda inmediatamente (a otras personas y a la ambulancia). Es necesario verificar que la persona no esté respirando y que no tenga pulso, con lo cual se confirma un estado de paro cardiaco. Se deben iniciar las maniobras de reanimación cardiopulmonar (compresiones torácicas y respiración boca a boca) hasta que llegue el personal capacitado para su manejo. Es conveniente no movilizar a la persona, a menos que esté en riesgo su integridad física por alguna causa. No obstante, es conveniente levantar las piernas por arriba del resto del cuerpo. Algunos pacientes responden al propinar un golpe con el puño cerrado sobre el tórax en la región del corazón. El paciente que sobrevive a un paro cardiaco debe ser valorado escrupulosamente.