¿Qué es la fibrilación auricular?
Es la arritmia cardiaca más común en la población general. Usualmente afecta a personas mayores con o sin una enfermedad cardiaca subyacente; aunque también se puede presentar en jóvenes y adultos con corazones estructuralmente normales e incluso en niños y familiares cercanos en aquellas formas de fibrilación auricular (F.A.) familiar, que es una herencia genética.
La F.A. es una taquiarritmia supraventricular (ocurre en las aurículas) y consisten en una contracción muy rápida de las aurículas debido a múltiples impulsos que se generan en el tejido auricular, los impulsos de contracción son muy rápidos, van entre 400 a 600 lpm, por lo cual la cavidad no puede tener una contracción mecánica efectiva ni adecuada, lo cual provoca que la sangre pase muy lentamente y en algunos sitios se acumule más que en otros, favoreciendo la formación de trombos.
Otro efecto característico de esta arritmia es la irregularidad en la frecuencia cardiaca y en la contracción de los ventrículos. Los impulsos cardiacos se generan en el nodo sinusal, que está en las aurículas, y bajan a los ventrículos a través del nodo aurículo-ventricular (A-V) y el haz de His; cuando los impulsos auriculares son muy rápidos el nodo A-V no permiten que pasen a la misma velocidad, de manera que los va “filtrando” para que algunos pasen y otros no, si esto no ocurriera así, y los impulsos bajaran a los ventrículos a la misma frecuencia, entonces, los ventrículos no podrían contraerse de forma efectiva, por lo que no habría expulsión de sangre del corazón hacia el resto de los órganos del cuerpo y la persona moriría en cuestión de minutos. Debido que el nodo A-V permite que algunos latidos bajen y otros no, se produce la irregularidad en la frecuencia cardiaca de esta taquiarritmia, lo que da las manifestaciones clínicas de palpitaciones irregulares (TA – TA – TA – TATATATA – TA – TATA – TA). Aunque las aurículas tengan impulsos para latir a más de 400 lpm, los ventrículos no se van a contraer a más de 150 lpm, sin embargo la velocidad de contracción va a depender de la función del nodo A-V. En algunas ocasiones se dan medicamentos para enlentecer la conducción en este nodo, con el objetivo de que los ventrículos latan a una frecuencia normal (entre 60 a 100 lpm), en otras ocasiones la función del nodo está muy deteriorada, por lo que los ventrículos laten tan lento que es necesario colocar un marcapaso externo para poder tener un ritmo cardiaco normal.
La principal complicación que pueda tener la F.A. son procesos trombo-embólicos, esto es que pequeños trombos que se forman en la cavidad auricular, migren a diferentes partes del organismo, si los trombos se encuentran en la aurícula derecha, van a migrar a los pulmones provocando pequeñas obstrucciones en las arterias pulmonares, que en general no van a dar síntomas; si se producen en la aurícula izquierda van a migrar a la circulación sistémica produciendo embolias cerebrales principalmente, aunque también pueden provocar embolias en las arterias renales, gástricas, o incluso en los brazos o piernas, siendo estas complicaciones muy aparatosas y evidentes.
¿Cuáles son los síntomas principales?
La fibrilación auricular puede ser permanente o presentarse en episodios que alternan con el ritmo sinusal normal. El paciente suele manifestar palpitaciones, debilidad, falta de aire e incapacidad para realizar un esfuerzo físico. En caso de una embolia cerebral los síntomas pueden ser de parálisis, pérdida de la sensibilidad de alguna extremidad o pérdida del sentido de la vista. Ocasionalmente la fibrilación auricular puede conducir a una falla cardiaca.
¿Qué medidas se deben tomar?
Una vez realizado el diagnóstico, el médico dictará el tratamiento correcto. Existen diversas alternativas para tratar a un paciente con fibrilación auricular. Una opción es el uso de medicamentos antiarrítmicos para controlar la arritmia. Otra opción es realizar una ablación con radiofrecuencia de la arritmia. Si la arritmia está produciendo una descompensación aguda del estado circulatorio se puede requerir una cardioversión eléctrica. Los pacientes con fibrilación auricular deben recibir algún tratamiento para evitar la formación de coágulos (aspirina o anticoagulante).